El desafío, el «desafrío»

Hice caso al consejo que me envió mi amigo Darix sobre cómo conducir con frío. La idea de fondo para esta mañana era ir lo suficientemente abrigado como para no tener que ir pensando en ello y poder centrarme en conducir y disfrutar tranquileando. Pues esta mañana, consultando la previsión meteorológica, he visto que se abría una ventana más o menos apacible entre las diez y las doce: temperatura sobre los 8 grados y sin lluvia. Esta ha sido la estrategia.

Tenía la idea de llegar hasta la parcela, pero no lo he conseguido porque al llegar a Fuentelahigeuera de Albatages he decidido dar la vuelta porque empezaba a chispear. He aprovechado para conducir llovido, pero no quería conducir lloviendo. No me ha importado tener que dar la vuelta y no llegar a mi destino porque, en realidad, mi verdadero destino era simplemente rodar un rato. Hasta he rodado cinco minutos al sol, de quien se han apiadado las nubes un poquito.

He ido pertrechado con la chupa de invierno y con el cuello que me regalaron. Lo he utilizado hoy como he visto a algunos, como si fuera un sotocasco, dejando en el cuello el resto de la prenda arrebuñada. También he llevado puesto el cubrepantalón que compré el invierno pasado. Muy bien con esta prenda. Lo único que no me gusta es que la marca Miline, la de esta pieza, tiene su grafía dibujada de tal forma que se pueda confundir con la marca Alpine. He sabido que Miline es una marca española y creo que no debían andarse con complejos de branding con una de las grandes marcas, porque en mi opinión, este pantalón cumple sobradamente con su función.

Lo de las manos y los pies han sido otra cosa. Los dedos de las manos se me quedan congelados, como siempre. Por eso ando tras unos guantes calefactados o unos puños nuevos. El precio de ambas cosas viene siendo el mismo pero me parece que es más sencillo lo de los guantes, que no requieren instalación. Pero aun no me he decidido. Por otra parte, no me importaría cambiar los puños que vienen de serie por unos más serios.

Los pies se me han quedado muy fríos. Voy con unas botas bajas, muy bajas, de piel delgada, que no quitan nada de frío. Por eso estoy mirando por ahí para comprarme otras, que sean más abrigadas y que sean también un poco más altas. He visto unas, de marca Harley-Davidson, pero no sé si quitan el frío o no.

img_6349En fin, que he pasado un rato muy bueno. Me ha gustado conducir llovido, conducir fino. Me gusta mucho conducir fino. De paso he hecho algo que me encanta, pero no sé si es contraproducente para la moto. A ver si consigo explicarme.

Mi moto tiene seis velocidades. La sexta se puede poner a partir de 80 km/h según el manual del propietario. Bueno, pues pongo la sexta a 85 km/h y no acelero más, incluso dejo que caiga un poquito, y ahí es donde está el sonido que me gusta. Una especie de burbujeo, un blop-blop-blop que tapa el ruido del motor y el desagradable -para mí- zumbido de la inyección electrónica. Eso mismo lo hago en quinta velocidad a 70 o 75km/h, y suena igual de bien. Y en cuarta, y en tercera, y así sucesivamente. Es decir, llevo la moto al mínimo, incluso un poquito por debajo del mínimo recomendado para cada marcha. Es cuando más me gusta oír el sonido de la Street. Yo creo que ese sonido que hace en esa circunstancia es el nuevo sonido Harley que va a sustituir -que está sustituyendo- al de las motos carburadas. Es el mismo sonido que tiene la VRod y me gustaría saber, aunque lo desconozco, cómo suena el nuevo motor Milwakee 8.

A la vuelta he parado en Tórtola de Henares, pero en el bar acostumbrado no había tortilla. Este ha sido realmente el único punto negativo de la mañana. Lo demás ha sido estupendo.img_6350

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